Es la "Eva" del portafolio de Itata Paraíso, un vino sorprendente y crudo, elaborado con Moscatel de Alejandría macerada con pieles durante 3 semanas, lo que le da profundidad, textura y carácter.
Tuvo una guarda de 10 meses, con un 80 % en estanques plásticos estandarizados y un 20 % en barricas cuidadosamente seleccionadas.
En nariz muestra claramente su identidad: floral, suave, típica de la moscatel, pero sin exagerar. En boca es donde empieza a “rockear”: seco, con peso, textura, frescura y una acidez tensa que marca su verticalidad. Es un vino que habla del origen más que del estilo, que se siente vivo y sin maquillaje, y que deja huella por su honestidad más que por ornamentos.
Solo se produjeron 1.800 botellas.
Itata Paraíso es un proyecto familiar y boutique ubicado en Portezuelo, en el corazón del Valle del Itata. Desde 1952, esta viña ha mantenido viva la tradición del campo, con antiguas parras de País (centenarias), Carignan, Moscatel y Cabernet Sauvignon, algunas plantadas en los años 40, y una forma de hacer vino basada en la experiencia heredada, el trabajo manual y la conexión con la tierra.
Hasta hace poco, elaboraban sin enólogo, como un homenaje a la sabiduría campesina. Pero desde 2024, el proyecto suma una nueva etapa al incorporar como asesor al enólogo Diego Urra, quien acompaña respetuosamente la esencia natural de sus vinos. Bajo una mirada de mínima intervención, fermentaciones espontáneas y respeto por el entorno, cada botella de Itata Paraíso transmite la autenticidad del secano interior y la frescura del Itata profundo.
¿Te gustaría conocer más sobre el proyecto Itata Paraíso? Entrevistamos a Sebastián Ramírez como parte de nuestro ciclo de "Lives". Lo puedes ves aquí
Itata Paraíso | Blanco Paraíso | Moscatel de Alejandría
VIÑA
Itata Paraíso
VALLE
Itata
AÑADA
2024